Guía completa: Cómo hacer un germinador casero y germinar semillas paso a paso

¿Te gustaría disfrutar de alimentos frescos y llenos de nutrientes en la comodidad de tu hogar? ¡Entonces estás en el lugar correcto! En este artículo, te mostraremos cómo hacer realidad ese deseo al aprender a germinar semillas en casa. No importa si tienes experiencia en jardinería o si eres un principiante entusiasta, germinar semillas es una actividad accesible y gratificante que te permitirá cultivar tus propios brotes y germinados en cuestión de días. ¿Estás listo para descubrir los secretos de este proceso? Sigue leyendo y aprende cómo hacer un germinador de semillas casero o usar una bolsa germinadora de semillas, cómo seleccionar las semillas adecuadas, recetas con germinados, cómo cuidar de tus germinados y los nutrientes que pueden aportarte en deliciosos platos.

¡Prepárate para embarcarte en un viaje hacia una alimentación más saludable y sostenible desde la comodidad de tu propia cocina!

¿Qué son los germinados?

Los germinados son semillas que han comenzado a brotar y aún están vivas. Este proceso desencadena la liberación de los nutrientes contenidos en la semilla, manteniendo un bajo contenido calórico y conservando todos sus beneficios nutricionales.

Tipos de germinadores

La mayor parte de germinados se obtienen mediante hidroponía en germinadores de semillas como te explicamos más abajo, aunque existen otros tipos de germinador de plantas, métodos como:

• Macetas de turba
• Brotar en papel o algodón
• El cultivo tradicional en tierra
• Germinadores de barro como el GEO, que puedes encontrar en Amazon.
• Bandejas de plástico para hidroponía: Este es un buen germinador de semillas para niños, ya que no mancha, pues no usa tierra. Además, en caso de caerse no hay fragmentos a diferencia de los frascos de cristal.
• Bandejas de plástico con turba: Es una variante del anterior con tierra seca compactada para su venta. La desventaja es que mancha la tierra negra que trae y al recolectar hay que lavar bien los brotes.
• Germinadores en bote específicos para ello: Son botes diseñados para este fin como los que pueden encontrarse en múltiples tiendas. Si se hacen en botes de plástico, también pueden ser buenos germinadores de semillas para niños.
• Germinadores caseros: Normalmente se hacen con botes, abajo dejamos las instrucciones para crear el tuyo. Es un germinador casero y muy barato, por lo que suele ser ideal para iniciarse en el mundo de los brotes.
• Germinador eléctrico: Indudablemente es la más moderna de las opciones y la que más nos permite controlar las condiciones de cultivo. El germinador de semillas eléctrico suele venir con luces LED incorporadas, tapas para conservar la temperatura y humedad, e incluso medidores de humedad o temperatura. Es la opción más cara, sólo para personas que consumen mucho este alimento y están dispuestas a invertir una suma importante para controlar todo el proceso. Sinceramente, no la recomendamos más que para casos excepcionales en lugares frios o muy secos, en general es innecesario.

De hecho, se ha puesto tan de moda que actualmente puedes encontrar en Amazon multitud de herramientas de jardinería y germinadores para cultivar tus propios germinados en casa:

¿Qué es la hidroponía?

La hidroponía, una técnica revolucionaria de cultivo, ha ganado popularidad en los últimos años al ofrecer una forma innovadora y eficiente de hacer crecer plantas sin necesidad de suelo. Al adoptar esta práctica, no solo puedes disfrutar de exuberantes germinados de soja, chía, alfalfa y una amplia variedad de lechugas, ¡sino que también puedes germinar semillas con facilidad!

Este proceso es sorprendentemente sencillo, más abajo te enseñaremos a hacerlo. Sin embargo, aquí te adelantamos la idea: simplemente sumerge las semillas en agua, déjalas reposar durante un día y espera pacientemente a que broten. Luego, coloca las raíces en un recipiente con agua enriquecida con nutrientes, mientras que el resto de la planta permanece fuera. Esta técnica permite un crecimiento rápido y vigoroso, brindándote una solución práctica y eficaz para cultivar tus propios germinados en casa. ¡Prepárate para explorar las maravillas de la hidroponía y descubrir todo su potencial para transformar tu experiencia de cultivo!

ADVERTENCIA: no todas las plantas admiten el cultivo hidropónico, por eso abajo te explicaremos cuáles.

¿Cómo hacer un germinador casero?

A continuación, te presentamos una sencilla guía para crear tu propio germinador de semillas paso a paso. Con tres simples instrucciones, podrás disfrutar de brotes frescos y saludables en la comodidad de tu hogar. Es tan sencillo porque sabemos que muchos estáis buscando como hacer un germinador de semillas para niños en casa, así que nos hemos puesto creativos:

Materiales para hacer un germinador

Los materiales para hacer un germinador son tres y están bien a mano en cualquier cocina:

• Un bote: Puede ser uno que nos haya sobrado tras comer una conserva o alguno de plástico que no vayamos a usar.
• Una tela o malla: La necesitaremos para que filtre el agua de las semillas o brotes.
• Una goma o cuerda: La ataremos al cuello del bote para que sujete la malla o tela.

¿Cómo hacer germinados en casa fácil?

Aquí te presento una guía sencilla sobre cómo germinar semillas en casa de manera fácil y rápida:

1. Preparación del germinador: Lava el frasco germinador cuidadosamente y enjuaga las semillas que deseas germinar.
2. Colocación de las semillas: Coloca las semillas dentro del germinador y déjalas en remojo en agua durante un día.
3. Drenaje del agua: Pasado el tiempo de remojo, drena el agua del germinador y asegúrate de que el tapón esté en la posición adecuada.
4. Hidratación diaria: A partir de este punto, repite el proceso de hidratación diaria. Enjuaga las semillas con agua limpia, escúrrelas y vuelve a guardarlas en el germinador, manteniéndolo en un lugar adecuado.
5. Espera y cuidado: Repite el proceso de hidratación y drenaje diario durante aproximadamente 5 días. Asegúrate de mantener las condiciones adecuadas de humedad y temperatura según las indicaciones específicas para cada tipo de semilla. Si no quieres desperdiciar tanta agua inundando el bote y volviéndolo a vaciar, una buena opción es comprar un pulverizador de agua para hidratarlos a diario.
6. Limpieza final y consumo: Antes de consumir los germinados, lávalos nuevamente para eliminar cualquier residuo. ¡Y ya estarán listos para disfrutar!

Siguiendo estos simples pasos, sabrás a la perfección cómo usar germinadores de semillas, así podrás cultivar germinados frescos y nutritivos en casa de manera fácil. Disfruta de su sabor y beneficios para la salud en tus comidas diarias.

Descubre cómo utilizar una bolsa de germinación en tu cocina

En la búsqueda de soluciones prácticas y sostenibles para vosotros, también os traemos cómo germinar semillas en una bolsa germinadora. Dado el tamaño reducido de muchas cocinas actuales, la bolsa de germinación se ha convertido en un aliado invaluable. Su diseño compacto y duradero la convierte en una opción perfecta, desde la germinación de semillas hasta la preparación de leches vegetales, esta bolsa ofrece una solución práctica y sostenible para tu cocina. Además, al ser fabricada con materiales ecológicos y sin tintes, es una elección consciente para reducir los residuos que generamos en casa.

Germinación de semillas

La bolsa de germinación es ideal para cultivar tus propios brotes frescos en casa. Recuerda elegir semillas específicas para germinar y seguir los tiempos de remojo adecuados. Explora todas las posibilidades que esta bolsa te brinda y descubre cómo puedes disfrutar de alimentos frescos y saludables en tu hogar. El proceso es sencillo:

1. Coloca alrededor de 100 gramos de semillas en un recipiente con agua potable durante seis u ocho horas.
2. Escúrrelas durante un minuto dentro de la bolsa, enjuagándolas con agua corriente para eliminar impurezas.
3. Coloca la bolsa en un lugar ventilado y sin luz directa para mantener la humedad necesaria.
4. Asegúrate de remojar las semillas un par de veces al día y, en poco tiempo, verás cómo comienzan a germinar.
5. Aproximadamente entre siete a diez días después, podrás cosechar tus brotes frescos y sabrosos. Si no los consumes de inmediato, puedes conservarlos en el refrigerador durante varias semanas.

Consejos para semillas mucilaginosas

Algunas semillas, como las mucilaginosas ( como las semillas de lino y las semillas de zaragatona), requieren cuidados adicionales durante el proceso de germinación. Estas semillas generan una capa de gel alrededor cuando se humedecen, lo que puede dificultar su crecimiento adecuado. Sin embargo, con la bolsa de germinación, hay un truco para superar este desafío, te mostramos el proceso:

Utilización para leches vegetales

Además de la germinación de semillas, la bolsa de germinación también puede ser tu aliada en la preparación de deliciosas leches vegetales caseras. Por ejemplo, puedes hacer leche de anacardos en unos simples pasos:

1. Remoja los anacardos durante varias horas y luego mézclalos con agua en una batidora potente.
2. Vierte la mezcla en la bolsa de germinación.
3. Exprime para obtener la leche vegetal sin grumos.
4. ¡Listo! Ahora puedes disfrutar de tu leche vegetal casera.
5. Guardar el excedente en un recipiente hermético en el refrigerador por varios días.

¿Para qué sirven los germinados?

Los brotes pueden usarse en multitud de platos, generalmente en ensaladas, revueltos y salteados. Son muy saludables y nutritivos, pueden ayudarnos a mejorar nuestra dieta y por ello nuestra salud. Personalmente, no dejamos una ensalada sin germinados. A continuación, os enseñamos a cultivar estar delicias.

¿Cuáles son los beneficios de los germinados?

Los brotes no sólo son versátiles, saludables, nutritivos y deliciosos como te hemos explicado, sino que además, son muy baratos. Lo único que necesitas son semillas, una pequeña inversión en un germinador y agua. También puedes germinar en una servilleta aunque esto es mejor para sembrar pequeñas cantidades de semillas.

Si todavía no estás convencido te mostramos una lista de propiedades de los germinados:

• Refuerzan las defensas y el sistema inmunológico.
• Tienen una gran cantidad de antioxidantes, por lo que previenen el envejecimiento.
• Ayudan a la digestión y desinflaman el sistema digestivo.
• Mejoran el funcionamiento del sistema digestivo y favorecen el tránsito eliminando el estreñimiento.
• Rebajan el colesterol.
• Ayudan a perder peso, ya que tienen bajas calorías y sacian mucho.
• Sientan muy bien al estómago, por lo que son recomendables para niños, personas mayores o aquellos que tienen problemas intestinales.

¿Qué nutrientes tienen los germinados?

Ahora te vamos a descubrir los asombrosos beneficios de los germinados, una poderosa fuente de nutrientes concentrados en brotes vivos. Estos pequeños tesoros proporcionan aminoácidos esenciales, potentes dosis de vitamina C, beta carotenos, vitaminas del complejo B y vitamina E. Además, contienen calcio, potasio, hierro y una variedad de oligoelementos esenciales. Con su bajo contenido calórico, los germinados son una opción nutritiva y saludable. Sumérgete en esta exploración de los nutrientes con notros:

• Impulso de vitamina C: La germinación aumenta significativamente el contenido de vitamina C en los brotes. Por ejemplo, la soja germinada puede experimentar un aumento del 100% en su contenido de vitamina C en tan solo cinco días, mientras que los brotes de trigo pueden llegar a incrementarlo en un asombroso 600%.
• Rico en beta carotenos: Los germinados, como la alfalfa, superan a alimentos como el tomate o el pimiento verde en su contenido de beta carotenos, una forma de provitamina A. Los brotes de col y guisantes también son excelentes fuentes de esta vitamina esencial para el crecimiento, desarrollo, salud visual y el sistema reproductor.
• Abundancia de vitaminas B: Los germinados de alfalfa, trigo, girasol, centeno y sésamo contienen tiamina (B1), riboflavina (B2) y niacina (B3), las cuales desempeñan un papel crucial en el funcionamiento del sistema nervioso.
• Beneficios de la vitamina E: La vitamina E actúa como un antioxidante celular, protege el corazón y tonifica el organismo. El trigo germinado puede triplicar su contenido de vitamina E.
• Vitamina K: Presente en la alfalfa germinada, esta vitamina desempeña un papel clave en la coagulación de la sangre.
• Energía de la clorofila: Las semillas germinadas de trigo y alfalfa sintetizan una cantidad considerable de clorofila. Este compuesto es absorbido directamente por la sangre, activando el metabolismo celular, mejorando la defensa y resistencia del organismo, y promoviendo la regeneración celular y la función respiratoria. La clorofila también potencia los procesos naturales de curación, depura la sangre, combate infecciones y equilibra el pH del cuerpo.
• Fuente de calcio y potasio: Los germinados de sésamo son ricos en calcio, al igual que los brotes de almendra, girasol, alfalfa y garbanzo. El potasio se encuentra presente en los brotes de almendra, sésamo, girasol, soja y judías.
• Importante contenido de hierro: Los brotes de alfalfa, fenogreco, lentejas, soja roja y soja verde contienen cantidades significativas de hierro.
• Oligoelementos esenciales: Los germinados son una fuente natural de oligoelementos, como el yodo, zinc, selenio, silicio, cromo y cobalto.
• Enzimas digestivas: Al consumir los germinados en su estado crudo, las enzimas presentes en las semillas germinadas, conocidas como diastasas, facilitan la digestión de la fibra, proteínas y grasas.
• Nutritivos y bajos en calorías: Los germinados son altamente nutritivos y bajos en calorías. Por ejemplo, 100 gramos de brotes de soja contienen aproximadamente 30 calorías, lo que los convierte en una opción saludable y ligera.

¿Qué semillas puedo germinar?

Si te estás preguntando qué semillas puedes germinar, la respuesta es ¡prácticamente todas! Sin embargo, algunas son especialmente destacables debido a sus nutrientes y sabores deliciosos. Hemos elaborado una lista de los mejores brotes, desde los más conocidos hasta los menos populares, para que puedas disfrutar de una variedad de opciones en tus platos. ¡Prepárate para explorar un mundo de sabores y beneficios nutricionales! 😉

• Berros: de un sabor amargo suave, una delicatessen que no deja a nadie indiferente y con buena cantidad de proteína y fibra también. Su textura es fibrosa, pero tierna y suave.
• Lentejas: una legumbre archiconocida que cambia completamente su sabor al brotar. Algunos de los beneficios de los germinados de lenteja es que conserva tanta proteína como algunas carnes e hidratos de carbonos complejos y saludables. Una alternativa fácil para hacer tus primeros brotes y exquisita. También te evitas todos los gases de las lentejas.
• Garbanzos: se encuentra en una situación muy parecida a la anterior, también tiene proteína completa lo que puede ser de gran utilidad para veganos y vegetarianos. Además, su sabor es muy suave pero característico ideal para aportar sabor a ensaladas y bocadillos.
• Semillas de calabaza: lo cierto es que prepararla es una engorro, puesto que hay que limpiar los brotes de las cáscaras duras de las semillas. Pero a los pacientes les espera un resultado muy parecido al de la soja con una textura algo más fibrosa.
• Trigo: una semilla poco usada más allá del pan, pero con muchas otras propiedades que se pueden aprovechar. Sus brotes son muy similares a los de la alfalfa, pero más fibrosos y proteicos. Además, sus semillas hidratadas tienen un sabor dulce de forma natural absolutamente exquisito.
• Rábanos: unos germinados poco conocidos por su sabor fuerte y picante, pero que pueden hacer las delicias de los más atrevidos.
• Mostaza: continuamos con los picantes, para nosotros uno de los más sabrosos y que merecen realmente la pena. La textura es similar a la de la alfalfa, pero con un sabor potente que acompañado de vinagre es maravilloso.
• Fenogreco: realmente una planta a la que se atribuyen propiedades casi mágicas. Se cree que tiene la capacidad de aumentar el pecho de las mujeres, mejorar la lactancia, ayudar con múltiples problemas de salud y dar un olor dulce al sudor. No hemos encontrado pruebas de nada de ello, pero podemos dar fe de que sus brotes son deliciosos y suaves.
• Guisante: esta leguminosa ya en su forma habitual de consumo es una bomba nutricional, en especial por su cantidad gigante de proteínas. Pero en versión brote también puede ser una magnífica opción.
• Sésamo: un resultado similar a la alfalfa, pero más grande, también es más oleaginosa y se nota al comerla, tiene un gran aporte de energía.
• Chía: semilla conocida para puddings deliciosos y otros postres, pero muy ignorada para brotes y ensaladas. No sólo se puede añadir son brotar para un toque crujiente a la ensalada, sino que se puede brotar para formar la base de ésta. Su sabor es indistinguible del de la alfalfa, aunque su textura es más fina y menos crujiente. ¡Algo que merece la pena probar!
• Semillas de girasol: Estas semillas ofrecen una experiencia única al germinar. Los brotes de girasol tienen un sabor suave y crujiente, y son una excelente fuente de vitamina E, grasas saludables y antioxidantes.
• Maíz: Si bien es más común consumirlo en forma de mazorcas, los brotes de maíz son una opción interesante. Agregan un sabor dulce y crujiente a tus ensaladas y platos, además de aportar fibra y antioxidantes.
• Rabanitos: Los germinados de rábanos son una deliciosa adición a tus platos. Aportan un toque picante y un sabor refrescante, además de ser una buena fuente de vitamina C y fibra.
• Guisante, chícharo, petipuás, arveja o alverja: Los brotes de guisantes son tiernos, dulces y llenos de sabor. Son una excelente fuente de proteínas, fibra y minerales, y se pueden agregar a ensaladas, salteados y otros platos.

Estas semillas adicionales ampliarán aún más tu variedad de germinados, permitiéndote explorar nuevos sabores y beneficios nutricionales. ¡No dudes en probar diferentes combinaciones y descubrir tus germinados favoritos!

Conclusión

¡Felicidades! Ahora estás listo para embarcarte en la emocionante aventura de germinar semillas en casa. Con las instrucciones y consejos que te hemos proporcionado, podrás crear tu propio germinador de semillas casero y disfrutar de los deliciosos y nutritivos germinados en tus comidas diarias. La hidroponía te ofrece una forma práctica y eficiente de cultivar brotes y germinados, permitiéndote disfrutar de alimentos frescos y llenos de vida en cualquier época del año. Así que no esperes más, ¡comienza hoy mismo y descubre los increíbles beneficios de germinar semillas en casa! ¡Buena suerte en tu viaje hacia una alimentación más saludable y sostenible!